10.- Hoteles del amor
Estos hoteles son exclusivos para pasar un momento privado con tu pareja, pero lo que los hace diferentes a los demás hoteles es que estos tienen decoraciones muy exageradas, todo con la intención de cumplir las extrañas y locas fantasías de algunas parejas.
Existen diferentes salas temáticas basadas en lugares exóticos, como castillos o edificios sin ventanas, pero también en caricaturas japonesas, o personajes como Hello Kitty. Y bueno, por más excéntricos que sean estos hoteles, quienes han entrado afirman que la discreción está asegurada, pues las habitaciones generalmente se seleccionan a través de un panel de botones y se pagan en un cajero automático.
9.- Dejar propina es un insulto
En Japón dejar el famoso 10% o 15% de propina en la mesa de los restaurantes, lo consideran un insulto, para los meseros japoneses esto significa que estás exigiendo un servicio mucho mejor al que te dieron, o incluso pueden tomar esta acción como un intento de soborno.
Así que si un día visitas Japón, por respeto no dejen propinas o pensarán que eres alguien sin educación.
8.- Tener los dientes chuecos
Parece increíble, pero los japoneses gastan hasta 350 dólares o más en dentistas para hacer lucir sus dientes como colmillos, lo hacen inspirándose en personajes de caricaturas y películas japonesas, pues de acuerdo a sus estándares de belleza esto los hace lucir más jóvenes, sin mencionar que los colmillos grandes son considerados en Japón como algo muy atractivo.
7.- Rociar sal para la buena fortuna.
Mientras que en esta parte del mundo tirar sal en la mesa es considerado un mal augurio o algo de mala suerte, en Japón tienen la costumbre de rociar sal alrededor de los escenarios de los teatros antes de comenzar con la función, esto con el fin de ahuyentar a los malos espíritus que causan las malas actuaciones, ya que ellos creen que hay fantasmas que hacen la maldad de distraer a los actores. Una superstición algo extraña, ¿pero bastante interesante no creen?
6.- Un Spa con temática de Ramen
Sin duda este es uno de los platillos que más aman los japoneses, por lo tanto entendemos que le hayan dado tributo creando un spa en su honor, donde las bañeras o piscinas tienen forma de tazón de ramen.
Si eso de por sí ya es muy extraño te sorprenderá saber que en esas piscinas las personas se bañan nadando entre fideos y aderezo de ramen.
5.- La isla de los conejos
La pequeña isla de Okunoshima es famosa porque en ella viven una enorme cantidad de conejos, esto ha hecho que la isla sea visitada por cientos de turistas convirtiendo el lugar en una de las atracciones más tiernas de Japón.
Hay empleados que se encargan del mantenimiento de la isla y del cuidado de los conejos y prohíben estrictamente llevar perros y gatos. Y si se preguntaban ¿cómo llegaron ahí todos esos animalitos? Pues resulta que esta isla era utilizada como base militar, donde usaban conejos para hacer crueles experimentos, pero cuando la base dejó de existir, los conejos fueron puestos en libertad y poblaron todo el lugar.
4.- El número 4 es de mala suerte
Los japoneses le tienen miedo al número 4, para ellos representa casi todo lo malo, la mala suerte, la tristeza y hasta la muerte, por eso es normal ver que eliminen el 4 de los botones de los elevadores o de las páginas de los libros, incluso que evitan mencionarlo en voz alta cuando están contando algo.
3.- Helado de sabores extraños
Todos conocemos una gran variedad de sabores en los helados, como fresa, chocolate o vainilla que por supuesto nos encantan, pero en Japón existen sabores muy extraños y que con solo escuchar de qué están preparados, nos pueden resultar muy repugnantes.
En las tiendas japonesas es común ver helados con sabor a estofado, cactus, pollo, cangrejo, wasabi y hasta de leche materna.
2.- El pollo de KFC es un platillo navideño
En Japón no se preocupan mucho por cocinar durante la víspera de Navidad, para ellos basta con ir al KFC y pedir una orden de pollo frito y con eso la cena navideña está lista.
Esto ocurrió gracias a una agresiva campaña publicitaria que surgió durante los años 70, que al parecer, funcionó bastante bien.
1.- Inyectarse agua salada en la frente
Así como lo escucharon, un documental realizado por la National Geographic mostró que muchos japoneses se inyectan agua con sal en la frente, esto hace parecer como si tuvieran una enorme espinilla arriba de los ojos, después apachurran en medio de ese bulto para crear un espacio, haciendo que la frente tome forma de rosquilla, una moda bastante extraña pero que en Japón es considerado como algo sumamente atractivo.
Comentarios
Publicar un comentario